En nuestra lista de este año tiene mucho peso el cine europeo. Tal vez por eso, la mayoría de los largometrajes que aquí recogemos han contado con una difusión limitada en los cines, pese a su indudable calidad. Sin embargo, sus realizadores han estado libres de las ataduras argumentales propias de los estándares más comerciales, y lo han aprovechado para contar historias comprometidas y humanas, que merece la pena conocer.
Calvary
Durante una confesión, el padre James es amenazado por un hombre que quiere asesinarle para vengar los abusos que sufrió cuando era un niño. Con el trasfondo de los escándalos sexuales de la Iglesia en Irlanda, McDonagh pone en liza a un buen sacerdote que absorbe el dolor causado por los errores de otros, más el mal que destilan los vecinos de un pequeño pueblo costero. Oscuro film, de profundas reflexiones, en el que se luce un excelente Brendan Gleeson, que interpreta con absoluta credibilidad a un hombre comprometido con su fe y su entorno, que vivirá un particular Vía Crucis.
Mandarinas
Esta coproducción estoniogeorgiana nos traslada a una provincia azotada por la guerra en Georgia, a principios de los noventa. Un anciano acoge a dos soldados de diferentes bandos, heridos en un tiroteo junto a su casa. Su autoridad moral será la que mantenga el orden entre los enemigos, dispuestos a vengar la muerte de los suyos, cuando se recuperen de sus lesiones. Esta pequeña película, sobre el conflicto entre países de la antigua Unión Soviética, ofrece una mirada sensata, honesta y libre de prejuicios hacia la guerra, más allá de partidismos.
La historia de Marie Heurtin
A veces la realidad supera a la ficción y eso ocurre en esta adaptación de un hecho sucedido en un convento francés, en el siglo XIX, donde los métodos educativos de las religiosas para tratar a sordomudas resultan insuficientes, cuando reciben la solicitud de ingreso de una chica que, además, es ciega. Jean-Pierre Améris evita todo tipo de clichés en un drama que requiere esfuerzo por parte del espectador, acerca de una entusiasta monja que lleva al extremo la caridad cristiana y el amor al prójimo, tratando de sacar a una joven de la más absoluta oscuridad.
Timbuktu
La acción se desarrolla en Mali, país africano donde una comunidad musulmana sufre el terror yihadista, cuando estos toman la ciudad de Timbuktu, imponiendo todo tipo de absurdas prohibiciones y aplicando leyes injustas. Este interesante relato está dirigido por el mauritano afincado en Francia Abderrahmane Sissako. Nace de las entrañas mismas del islam, deparando una visión sin intermediarios ni ideas preconcebidas sobre esta religión. Traza una clara línea entre aquellos que viven en paz su fe y los que la utilizan como arma arrojadiza frente los demás.
Selma
Cierra el listado esta película biográfica, dedicada a la figura de Martin Luther King y su decidida lucha contra la segregación racial en Estados Unidos. Escenifica las históricas marchas de protesta de Selma a Montgomery para reivindicar el acceso al voto de los ciudadanos negros. La cinta señala la importancia del cristianismo en esa defensa de los derechos civiles, tanto por parte del propio Luther King, que era pastor protestante, como de las personas de distintas confesiones que le apoyaron.