Año: 2017
País: Estados Unidos
Duración: 108 min.
Género: Drama
Categoría: Simbología cristiana
Edad: +7
Director: Steve Gomer
Guión: Steve Armour
Música: Conni Ellisor, John Mock
Fotografía: Eduardo Enrique Mayén
Reparto: John Corbett, Cara Buono, Barry Corbin, David Keith, Gregory Alan Williams, Patrick Johnson
El primer destino del recién ordenado sacerdote episcopaliano, Michael Spurlock, es una zona rural del estado de Tennessee. En concreto, es enviado a una iglesia, conocida como de Todos los santos, que se encuentra al borde de la desaparición. Sus planes serán inesperadamente alterados por la llegada al lugar de unos refugiados birmanos. Pese a los iniciales problemas de integración de estos con la escasa feligresía, los inmigrantes se convertirán en un revulsivo para la comunidad y para el inexperto clérigo.
Es una lástima que esta película tan inspiradora y bien contada se estrene en España directamente en DVD, sin haber pasado previamente por los cines. La producción se desmarca de otras propuestas cristianas procedentes de Estados Unidos, que frecuentemente se escoran hacia lo evidente. De la mano del realizador Steve Gomer, la cinta adapta una historia real, plasmada con una hábil armonía entre la trama religiosa y la propiamente caritativa, que se articula a través de los birmanos que buscan amparo.
El protagonista del film es un antiguo comercial, al que su terquedad le pasó malas jugadas en su anterior ocupación y ahora le dificulta la obediencia a su obispo. Afronta una nueva etapa en su vida, acompañado por su mujer y su hijo. Ambos le incitarán, de una u otra forma, a pasar a la acción, en vez de quedarse en su zona de comodidad, paralizado por los obvios contratiempos. De este modo, Michael ideará un proyecto de siembra en unos campos emplazados junto a la iglesia, creyendo seguir los designios divinos, y con la esperanza de lograr los réditos suficientes para salvar el templo y asistir a sus inquilinos asiáticos.
El desequilibrio existente en la sociedad actual entre lo espiritual y lo material queda reflejado en la crisis de la iglesia de Todos los santos, cuyo edificio parece abocado a transformarse, curiosamente, en un supermercado. Por otra parte, estamos ante un relato que profundiza con tino en el sentido de la fe, plasmando las misteriosas formas de actuar de un Dios que permite que llueva sobre justos e injustos. Asimismo, el largometraje incide en el valor que tiene la pertenencia a una comunidad.
