

Año: 2016
País: Estados Unidos
Duración: 107 min.
Género: Drama
Categoría: Películas cristianas
Edad: +13
Director: Kevin Reynolds
Guión: Kevin Reynolds, Paul Aiello
Música: Roque Baños
Fotografía: Lorenzo Senatore
Reparto: Joseph Fiennes, Tom Felton, Peter Firth, Cliff Curtis, María Botto, Luis Callejo, Antonio Gil
Poncio Pilato le asigna al tribuno Clavius la misión de supervisar la crucifixión y sepultura de un hombre llamado Jesús, al que algunos consideran el Mesías. Al poco de fallecer este se cumplen los temores de los miembros del sanedrín, cuando desaparece el cuerpo y comienza a extenderse el rumor de que ha resucitado. La situación comprometerá aún más la compleja estabilidad de la zona, en la que son frecuentes las revueltas, y Clavius tendrá la tarea de reestablecer el orden, investigando lo ocurrido con la ayuda del joven Lucius.
La película recuerda a las clásicas producciones bíblicas de mediados del siglo pasado, pero con un estilo renovado y actualizado al siglo XXI. Se centra en los sucesos acaecidos tras la muerte del Nazareno, partiendo de su crucifixión y explorando terrenos transitados con anterioridad por los títulos europeos Una historia que comenzó hace 2000 años y En busca de la tumba de Cristo, aunque con unos medios más generosos y unos resultados considerablemente superiores.
Dirige el experimentado Kevin Reynolds, que ha coescrito el guión junto al debutante Paul Aiello. El protagonismo ha recaído en Joseph Fiennes -el intérprete más popular del reparto-, quien ha encontrado el tono adecuado para insuflar la energía y el carisma que requería su papel. Curiosamente, su hermano Ralph puso voz a Jesucristo en el film de animación El hombre que hacía milagros. Aquí es el neozelandés Cliff Curtis el que representa al Maestro, con un estilo sobrio y cercano.
Resucitado cumple con su doble propósito de entretener, aportando escenas de acción bien resueltas, y de reflexionar sobre cuestiones de fe, mostrando los hechos a través de los ojos de un romano escéptico. Es mucho más fiel al texto bíblico que otros productos que nos han llegado recientemente de Hollywood, sin resultar excluyente para cualquiera a quien le interese mínimamente la temática. Fue rodada en Malta y en localizaciones españolas de Almería, motivo por el que participan un buen número de españoles en el equipo. La banda sonora la firma el compositor murciano Roque Baños, que ha realizado un estimable trabajo.
Un aspecto especialmente complicado de la historia reside en la transformación que va sufriendo el tribuno Clavius, a medida que va conociendo más datos sobre Jesús y es testigo de acontecimientos extraordinarios. El arco dramático del personaje está bien definido, con situaciones lo suficientemente esclarecedoras como para empujar al romano a meditar sobre su propia vida, en la que está acostumbrado a convivir con la violencia y la muerte cada día, mientras el pujante cristianismo supone la llegada de un nuevo orden.
Un cristiano perseguido
Uno de los productores de la cinta, Pete Shilaimon, huyó de Irak con su familia en los años setenta. En las entrevistas que acompañaron a la presentación del film, relató que allí vivían su fe cristiana en la clandestinidad. Al menos hasta que un día, que iba a comprar comida junto a su madre, la cruz que esta ocultaba bajo su ropa quedó accidentalmente visible por unos segundos y fue apedreada con él como testigo, a sus cinco años de edad. Su padre murió en la fuga hacia Estados Unidos, país al que llegó con sus hermanos. Shilaimon ha confesado sentirse identificado con Clavius en los momentos difíciles de su vida. No hay duda de que se trata de un proyecto muy personal para él, por el que fue recibido por el papa Francisco en el Vaticano, junto al resto del equipo.