

Año: 1987
País: Dinamarca
Duración: 102 min.
Género: Comedia
Categoría: Películas cristianas
Edad: TP
Director: Gabriel Axel
Guión: Gabriel Axel
Música: Per Nørgaard
Fotografía: Henning Kristiansen
Reparto: Stéphane Audran, Bodil Kjer, Birgitte Federspiel, Jarl Kulle, Jean-Philippe Lafont
Siglo XIX. En un pequeño pueblo de pescadores situado en Jutlandia, Dinamarca, dos piadosas hermanas continúan la labor de evangelización comenzada por su padre. En su hogar acogen a una cocinera llamada Babette, quien llega a la aldea desde París, huyendo de la guerra que ha estallado en Francia. Años más tarde, la forastera gana un premio en la lotería y decide preparar una suculenta cena francesa, para agradecer la hospitalidad recibida. La noticia despertará muchos recelos entre los vecinos de la hermética y apolillada localidad rural, que viven instalados en el desapego por lo terrenal.
La historia sigue los pasos de las hijas de un pastor protestante, quienes en su juventud tomaron la determinación de permanecer solteras, declinando cualquier proposición en sentido contrario. Lideran una comunidad puritana, cuyos miembros transitan por la vida sin entusiasmo y con cierto temor, tras acotar la fe a un mero cúmulo de rígidas normas. En este contexto, Babette será un soplo de aire fresco, al personificar el equilibrio entre cuerpo y espíritu. El catolicismo de la cocinera gala es el contrapunto al protestantismo exacerbado del lugar, aunque el film lo que nos presenta, en términos generales, son dos formas muy distintas de entender el cristianismo.
El largometraje fue escrito y dirigido por el danés Gabriel Axel, un cineasta del que no se conocen muchos más trabajos fuera de las fronteras de su país, pese a su dilatada carrera. Axel adaptó fielmente la novela de su compatriota Isak Dinesen, también autora de Memorias de África. Su propuesta es somera en apariencia, pero profunda en su contenido y está aderezada con un humor muy sutil, que redondea el resultado.
Los escenarios en los que se desarrollan los acontecimientos y la sobriedad formal del conjunto recuerdan a Ordet (La palabra). De hecho, en el El festín de Babette participan algunos de los actores de la obra maestra de Dreyer. El personaje más destacado es de Birgitte Federspiel, la inolvidable Inger, como una de las hermanas protagonistas. Por otra parte, encontramos en papeles más secundarios a Cay Kristiansen y Preben Lerdorff Rye, quienes encarnaron a Andres y al emblemático Johannes, respectivamente, en la cinta de Dreyer.
La producción recibió el Óscar en la categoría de habla no inglesa y el BAFTA en el mismo apartado, entre otros muchos galardones.
Una de las películas preferidas de Francisco
El papa Francisco se ha hecho eco en varias ocasiones de este título, entre ellas en la exhortación apostólica Amoris laetitia, que fue el primer documento pontificio en incluir una mención a una película. En las confidencias previas a su papado, recogidas en el libro El jesuita: Conversaciones con el cardenal Jorge Bergoglio, definió el relato como: «Un caso típico de exageración de los límites prohibitivos. Sus protagonistas son personas que viven un exagerado calvinismo puritano, a tal punto que la redención de Cristo se vive como una negación de las cosas de este mundo… En verdad, esa comunidad no sabía lo que era la felicidad. Vivía aplastada por el dolor. Estaba adherida a lo pálido de la vida. Le tenía miedo al amor».