Inauguramos un nuevo apartado dentro de la web, recogiendo las que han sido para nosotros las mejores películas con valores del pasado año.

 

1

Still Walking (Caminando) El japonés Hirokazu Koreeda ha confirmado las buenas maneras para el cine familiar que apuntó con Nadie sabe, firmando su obra más redonda hasta la fecha. Con suma destreza se adentra en el seno de una familia azotada por una trágica pérdida, mostrando los desencuentros entre sus personajes y el modo en que el mutuo amor prevalece sobre lo demás. La cinta es un canto a la familia -con sus imperfecciones- y expone el valor que esta tiene en cada individuo.


2

Up

Pete Docter, Bob Peterson

Up Up nos presenta la historia de un anciano incapaz de seguir adelante, después del fallecimiento de su amada esposa. Aferrándose a sus recuerdos y a su feliz pasado protegerá su casa a capa y espada, cuando empiece a peligrar por la construcción de unos nuevos edificios. En su camino se cruzará un pequeño aventurero, que trastocará sus planes, muy a su pesar. Este film de Pixar atrapa fotograma a fotograma con un relato cargado de nostalgia, que ofrece una excelsa mirada hacia el matrimonio y las distintas etapas de la vida.


3

The Visitor

Thomas McCarthy

The Visitor La propuesta también sigue los pasos de un hombre viudo, que ha perdido la ilusión por vivir. En un forzado viaje que realiza a Nueva York conocerá, de forma inesperada, a un joven músico sirio. Pese a lo abrupto de su primer encuentro, la amistad que irá trabando con el africano y la afición que comparte con él por la percusión le devolverá la ilusión. El largometraje incide en el valor de las relaciones interculturales y aborda el problema de la inmigración en Estados Unidos. Está protagonizado por un sublime Richard Jenkins.


4

Amazing Grace

Michael Apted

Amazing Grace Este drama de época escenifica la inspiradora labor del político inglés William Wilberforce, acercándose a dos periodos de tiempo diferentes de su vida. Wilberforce abogó con firmeza por la abolición de la esclavitud, aprovechando su relevante posición para combatir las injusticias sociales y así servir a Dios. El título de la producción está tomado de un himno compuesto por un esclavista británico que, tras arrepentirse de su pasado, se convirtió al cristianismo.


5

Frozen River (Río helado)

Courtney Hunt

Frozen River (Río helado) Ha llegado a los cines españoles impulsada por su victoria en el Festival de Sundance, en la edición de 2008. Narra los avatares de dos mujeres inmersas en una complicada situación, originada por su escasez de recursos económicos y sus carencias afectivas. Pese a estar enfrentadas entre sí, el tiempo propiciará que aprendan a entenderse y aflore en su interior lo mejor de sí mismas. El río helado que da nombre al film es parte fundamental del mismo, pues sirve de metáfora acerca de la existencia hostil y solitaria de sus dos protagonistas.