

Año: 1953
País: Estados Unidos
Duración: 77 min.
Género: Animación, Fantasía, Aventuras, Musical
Categoría: Películas infantiles
Edad: TP
Director: Clyde Geronimi, Wilfred Jackson, Hamilton Luske, Jack Kinney
Guión: Ted Sears, Erdman Penner, Bill Peet, Winston Hibler, Joe Rinaldi, Milt Banta, Ralph Wright, William Cottrell
Música: Oliver Wallace
Fotografía:
Reparto:
Los pequeños John y Michael disfrutan con las historias sobre Peter Pan que les cuenta su hermana mayor Wendy. Una noche aparece en su habitación el héroe de sus cuentos, acompañado por la fiel Campanilla. Junto a ellos viajan hasta el país de Nunca Jamás, donde vivirán grandes aventuras. En aquel mágico lugar se encontrarán con los Niños Perdidos y tendrán que luchar contra el capitán Garfio, patrón de un barco con unos marineros poco diestros.
Desde su infancia, Walt Disney conocía bien la obra del novelista y dramaturgo británico J. M. Barrie adaptada por este título, pues había interpretado a Pan en una función escolar. Aparte de esto, el relato del niño que nunca crece ofrecía muchas posibilidades con su fantástico mundo de hadas, sirenas, indios y piratas. De modo que, a finales de los años treinta, Disney consiguió los derechos para su traslado al cine, después de un largo periodo de negociaciones. Estaba previsto que se convirtiera en la segunda película de su compañía, pero se retrasó y supuso la decimocuarta, tras la prolífica producción de la década de los cuarenta.
Entre los secundarios de la cinta destacan el simpático cocodrilo que la tiene tomada con el capitán Garfio y el abnegado escudero de este, el señor Smee. La caracterización de Peter Pan, por su parte, no convenció a Walt Disney al parecerle frío y poco agradable, si bien expertos en la novela de Barrie consideran el retrato atinado, argumentando que el personaje fue originalmente concebido así.
El film habla del paso de la niñez a la edad adulta que debe dar Wendy, pese a sus reticencias iniciales, y que supone aceptar una serie de responsabilidades y reglas, a las que Peter Pan se resiste. El largometraje le deparó un importante éxito a la factoría del ratón, con una recaudación que superó los ochenta millones de dólares.